Deymer Mena, líder juvenil del Chocó, recuerda que amplios sectores de la juventud son vulnerables y se convierten en "carne de cañón".
Imagen Thumbnail para Deymer Mena G.jpg
Por Deymer Andrés Mena Guardia, abogado, y miembro del Programa "100 nuevas plumas en el Bicentenario, 2010-2021"
Colombia es un país con 44 millones de habitantes aproximadamente, de los cuales 24,0% son jóvenes, es decir, 10.691.366 personas entre 14 y 26 años de edad, conforme a la Ley 375 (ley de juventud).
Para los jóvenes, el plan de Santos "Educación de calidad, el camino hacia la prosperidad" es muy importante, pues busca disminuir las brechas de educación de los niños, niñas y jóvenes del país. Ojalá lo logre.
En Colombia faltan políticas públicas concretas que respondan a las necesidades de las y los jóvenes. Por esto, muchos terminan convertidos en carne de cañón, vinculados a la violencia, en expendios de droga, al margen de la ley.
Para completar, las acciones del Estado parecen direccionadas en la mayoría de los casos hacia el interior del país, y nosotros los chocoanos, ¡aquí! Con un bulto bien pesado, aunque llenos de esperanza y a veces con poca pro-actividad.
Disminuir las brechas que afectan a los jóvenes debe ser el reto del gobierno central, municipal y departamental, aplicando los principios de autonomía, diversidad, territorialidad y progresividad.
Actualmente, el nivel de desempleo de los y las jóvenes es del 22%, siendo el doble del promedio de las personas mayores de 26 años. Muchos análisis han demostrado que el comportamiento del desempleo, evidencia, entre otros aspectos, una vulnerabilidad específica en ciertos grupos, ya sea por su situación económica, por su edad, por su formación, etc.
Así, Colombia debe asumir urgentemente compromisos serios a corto, mediano y largo plazo con los sectores juveniles vulnerables. Las políticas deben incluirlos, garantizando el cumplimiento de sus derechos. Los jóvenes somos sujetos de derechos, capaces de transformar la sociedad y construir país desde las diferencias.
Crear un fondo nacional para la juventud, la ley de primer empleo, el acceso de los estratos más bajos a la educación técnico-profesional de calidad, y apoyo a las iniciativas empresariales de jóvenes, son algunas de las ideas para que Colombia cumpla el reto con su juventud.
Imagen Thumbnail para Deymer Mena G.jpg
Por Deymer Andrés Mena Guardia, abogado, y miembro del Programa "100 nuevas plumas en el Bicentenario, 2010-2021"
Colombia es un país con 44 millones de habitantes aproximadamente, de los cuales 24,0% son jóvenes, es decir, 10.691.366 personas entre 14 y 26 años de edad, conforme a la Ley 375 (ley de juventud).
Para los jóvenes, el plan de Santos "Educación de calidad, el camino hacia la prosperidad" es muy importante, pues busca disminuir las brechas de educación de los niños, niñas y jóvenes del país. Ojalá lo logre.
En Colombia faltan políticas públicas concretas que respondan a las necesidades de las y los jóvenes. Por esto, muchos terminan convertidos en carne de cañón, vinculados a la violencia, en expendios de droga, al margen de la ley.
Para completar, las acciones del Estado parecen direccionadas en la mayoría de los casos hacia el interior del país, y nosotros los chocoanos, ¡aquí! Con un bulto bien pesado, aunque llenos de esperanza y a veces con poca pro-actividad.
Disminuir las brechas que afectan a los jóvenes debe ser el reto del gobierno central, municipal y departamental, aplicando los principios de autonomía, diversidad, territorialidad y progresividad.
Actualmente, el nivel de desempleo de los y las jóvenes es del 22%, siendo el doble del promedio de las personas mayores de 26 años. Muchos análisis han demostrado que el comportamiento del desempleo, evidencia, entre otros aspectos, una vulnerabilidad específica en ciertos grupos, ya sea por su situación económica, por su edad, por su formación, etc.
Así, Colombia debe asumir urgentemente compromisos serios a corto, mediano y largo plazo con los sectores juveniles vulnerables. Las políticas deben incluirlos, garantizando el cumplimiento de sus derechos. Los jóvenes somos sujetos de derechos, capaces de transformar la sociedad y construir país desde las diferencias.
Crear un fondo nacional para la juventud, la ley de primer empleo, el acceso de los estratos más bajos a la educación técnico-profesional de calidad, y apoyo a las iniciativas empresariales de jóvenes, son algunas de las ideas para que Colombia cumpla el reto con su juventud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario